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Un 28 de Diciembre
De 1950, nace Juan María Traverso...
Juan María Traverso nació el 28 de Diciembre de 1950 en Ramallo, Provincia de Buenos Aires. Le dicen “El flaco” porque hasta los 30 años era flaco, luego dejó de fumar 3 años y engordó, para luego volver a fumar aunque sin perder los kilos.
Actualmente tiene su domicilio en Beccar, Provincia de Buenos Aires. Está casado con Susana y tienen tres hijos: María Paula, María Manuela y Juan Cruz. Juan María tuvo una infancia como cualquier chico de pueblo y tiene muy buenos recuerdos de esa época. Desde chico se dio cuenta que lo suyo eran los autos y en especial los “Fierros”. Le representaba una lucha conseguir que le prestaran el auto para dar unas vueltas en el potrero, hasta que a los 15 años pudo tener su propio auto, un F**d A sin escape que hacía un ruido infernal y el que hasta hoy recuerdan los vecinos de Ramallo.
Cursó la secundaria en el Colegio De La Salle en la Capital Federal y luego volvió a su ciudad natal para dedicarse a la actividad agropecuaria.
Se hizo amigo de "Marito" García, quien corría en karting y que luego incursionó en el Turismo Carretera. “El flaco” lo acompañaba a las carreras cada vez que podía y su debut al Turismo Carretera fue consecuencia de que García se incorporó al equipo oficial de General Motors y le cedió su Torino Liebre 1 1/2 con el que estaba participando.
Corrió su primera carrera el 31 de octubre de 1971 en la Vuelta de Pergamino, "Estaba más contento porque había ganado Coppello (su ídolo) que por haber debutado en Turismo Carretera", expresó “El flaco”.
Casi un año después, el 29 de octubre de 1972, ganó su primera carrera: el premio SUPERNAFTA YPF disputado en el semipermanente de 25 de Mayo. En su vuelta triunfal a Ramallo lo esperaba una multitud y los festejos duraron tres días.
En 1973 se incorporó al equipo oficial F**d, ocupando el lugar que había quedado vacante por la muerte de Estéfano y teniendo como compañero a Héctor Luis Gradassi.
En 1977 logró su primer campeonato de Turismo Carretera y repitió la victoria al año siguiente.
Puso algunas concesionarias de autos en Ramallo y San Pedro, hasta que reconoció que lo suyo no estaba atrás de un escritorio sino dentro de un auto de carrera y decidió dedicarse de lleno a esta actividad.
En 1979 hubo ciertos inconvenientes con la ACTC y el equipo F**d, por lo tanto “El flaco” se fue a correr a Europa en la Fórmula 2 con un March. Acerca de lo que implicaba ir a correr a Europa nos comenta “El flaco”: "Con el paso de las carreras le fui perdiendo el respeto a los demás corredores"; Ahí es donde perfeccionó su habilidad para correr con pista mojada.
Bernie Ecclestone le ofreció un contrato para correr la temporada de 1980 en la Fórmula Aurora y las 2 carreras en América de F1, pero en la Argentina su padre tenía problemas financieros (Fiplasto, empresa de la que era dueño don Juan Cruz Traverso, estaba en convocatoria de acreedores) y prefirió volver a acompañar a su padre en esa situación.
En 1983, de la mano de José Miguel Herceg y los hermanos Aventín, volvió al TC y punteó los campeonatos de TC 2000 y TC, pero terminó separándose de “El Polaco” por cuestiones económicas, con lo cual perdió las posibilidades en ambos campeonatos.
En 1985 se incorporó al equipo Renault de TC 2000 con un Renault 18 y en 1986, con Berta como preparador de los Renault oficiales, empezó una racha de sucesivas victorias y títulos en la categoría, obteniendo con la coupé Fuego, los campeonatos '86, '88, '90, '91, '92 y '93.
El campeonato de 1987, que ganó Silvio Oltra, fue una de sus mayores frustraciones deportivas ya que necesitaba sólo 2 puntos en la última carrera para ganar el campeonato y la pinchadura de una goma, sumada a que el equipo tardó demasiado en cambiarla, le quitó el título de las manos.
En 1988 Sevel organizó el 7º Desafío de los Valientes, una carrera en pista y en la tierra donde intervenían los mejores pilotos de pista y de rally. Todos con autos exactamente iguales: un Fiat Duna estándar, el mismo que el público podía adquirir en las concesionarias. Ahí Traverso mostró que era superior ya que les ganó en la pista y en la tierra a los mejores: Guerra, Raies, Bescham, Reutemann, etc.
En 1993 fue a correr al Turismo Italiano con Guerra y se quedó con el subcampeonato atrás de Angelito. Rompió relaciones a fines de ese año con Berta y Renault.
En 1994, con el apoyo de Peugeot, inició una etapa de desarrollo del Peugeot 405 para competir en TC 2000.
A mediados de año volvió al TC y a la victoria dentro de esa categoría con un Chevrolet, terminando sexto en el campeonato. (Consiguió dos triunfos ese año.)
En 1995 armó un equipo propio con Pedersoli, Canapino, Scarazzini, y con Angel Guerra como coequiper en TC 2000. Ganó los dos campeonatos más importantes del automovilismo argentino: el de TC y TC 2000.
Ese mismo año recibió el Olimpia de Plata, pero a pesar de la importancia de sus logros, el Círculo de Periodistas Deportivos le entregó el Olimpia de Oro a Nora Vega, que había tenido una buena actuación en los Panamericanos de Mar del Plata de ese año y había estado en todos los titulares de los diarios.
Ya en 1996 la ACTC, para reducir la diferencia que tenían algunos pilotos con mayor capacidad conductiva o mayor presupuesto respecto a los demás pilotos, implementó un sistema de lastres, penalizando con kilos al que sube al podio. “El flaco” se opuso a ese sistema debido a que obligaba a los pilotos a una permanente especulación respecto de los puntos y los kilos. Los comentarios de Juan María eran en ese entonces: “Aún si vengo ganando la carrera prefiero levantar en la última vuelta, salir cuarto y no ganar para no cargar kilos en el auto, de esta forma consigo mantenerlo más competitivo para todo el campeonato”. Su estrategia resultó acertada y ganó el campeonato de TC. Por el contrario, en el TC 2000 y por desinteligencias en el equipo, perdió el campeonato.
En 1997 fue ganador del campeonato de TC con comodidad y en TC 2000 sólo se adjudicó una carrera compitiendo contra equipos oficiales. (Ese año se implementó una importante modificación reglamentaria y se adoptaron los motores de 16 válvulas.)
En 1998 en TC, pasó a F**d y le devolvió protagonismo a la marca.
Se pegó una “piña” tremenda en el debut en Mar de Ajó y una serie de errores le hicieron perder el campeonato. Luego, ganó el de Top Race y en el TC 2000, corriendo en el equipo Honda y cuando venía siendo el puntero del campeonato, una seguidilla de episodios le quitan el campeonato: la salida de la rueda trasera derecha en el Cabalen, una piña espectacular en Olavarría luego de un toque con Luciano Crespi, problemas con una batería, un recargo por adelantarse en la largada.
En 1999 Campeón de Turismo Carretera con un F**d y en TC 2000 volvió a hacer una apuesta fuerte y se incorporó al equipo Mitsubishi para hacer un desarrollo desde cero. El equipo contaba con la asistencia técnica de Enrique Escalabroni, un ingeniero argentino radicado en Inglaterra y muy vinculado a las categorías más importantes de Europa. No consiguió victorias, sólo sumó 6 puntos y terminó discutiendo con su compañero y dueño del equipo, Gabriel Furlán.
En Top Race volvió a ganar el campeonato y en cuanto al TC, a principios de año se prometió ganar el campeonato y lo logró pero contra la voluntad de la dirigencia de la ACTC y la CAF.
En el 2000 una serie de desprolijidades cometidas, a juicio de “El flaco”, por la dirigencia de la ACTC, hizo que después de la carrera de Buenos Aires convoque a una conferencia de prensa y comunique su retiro del TC, prometiendo volver cuando se hiciera más transparente el manejo de la categoría por parte de los dirigentes. Como consecuencia de ésta decisión, el campeonato 2000 de TC empezó sin el campeón.
Firmó con el Toyota Team Argentina un contrato para ser piloto oficial de la marca en el TC 2000. Nuevamente tuvo que hacer un desarrollo desde cero y alcanzó el podio en la segunda carrera. Durante el año y a pesar de ser un equipo que recién se iniciaba en la categoría, obtuvo un récord de vuelta, una pole position y consiguió, en la última carrera del año y bajo la lluvia, la primer victoria de Toyota en la categoría.
Frontal como siempre, manifestó su descontento con el sistema de penalizar con lastres a los autos que no usaban el motor correspondiente al modelo. Sobre fin de año se modificó el reglamento y se benefició a éstos autos.
Durante el año también participó en el campeonato de Endurance a bordo de un Toyota Corona diesel y en oportunidad de disputarse las 2000 millas de Buenos Aires, compartió el equipo con su hijo Juan Cruz, quien debutaría oficialmente en el automovilismo.
A fin del 2000 la fundación KONEX le entregó el Premio KONEX de platino, un premio que tiene en cuenta la trayectoria de los últimos 10 años y que es decidido por un jurado integrado por deportistas y periodistas de dilatada trayectoria.
A principios del 2001 y sin descuidar su actividad como piloto de automóviles de competición, inició el desarrollo de este sitio conjuntamente con el desarrollo de marketing deportivo dentro del automovilismo, tanto de pilotos como de categorías.
Continuó compitiendo en el TC 2000 con un Toyota Corolla, obteniendo un triunfo el 9 de Septiembre en San Juan, ganando la carrera en la última curva con una recordada maniobra sobre el Pato Silva. Mientras preparaba su posible regreso al Turismo Carretera, realizó algunas pruebas ese año, cumplió 30 años con el automovilismo el 30 de Octubre.
En el 2002 vuelve al Turismo Carretera con un Chevrolet del equipo de los hermanos Urtubey, motorizado por Pablo Satriano.
No tuvo buenos resultados al no poder conseguir nunca un motorista que le entregara un buen impulsor, hasta que se incorpora al equipo Miguel Herceg con quien en la actualidad siguen trabajando.
En TC2000 se desvincula en buenos términos del equipo Toyota después de haber participado en las primeras 4 carreras, después hacia fin de año volvería a correr en la categoría a bordo de un Mitsubishi Lancer del equipo de Gabriel Furlan. También este año volvió a la Top Race manejando un BMW del equipo de Hugo Videla.
Campeón del Top Race con un BMW 320i del equipo de Hugo Videla. De esta manera consiguió su 3er. campeonato en la categoría y ahora son 16 los Campeonatos Nacionales ganados por el Flaco (6 de Turismo Carretera; 7 de TC2000 y 3 de Top Race).
Culminó 12º en el Campeonato de Turismo Carretera con un Chevrolet del equipo del Urtubey Competición.
El 2004 lo encuentra como en sus comienzos luchando por conseguir el Cameponato de Turismo Carretera con un Torino, motorizado por Omar Wilke y con el chásis de Juan Carlos Pianetto. Finaliza el campeonato en el 9º lugar. Además este año asumió como Presidente del Top Race.
En el año 2005 participó en dos categorías: el Turismo Carretera con un Torino y en el TRV6 representando los colores de River Plate con un Citroën C5.
En Agosto del 2005 se recordará por siempre porque el Flaco deja el automovilismo, dijo basta después de 35 años de vigencia y exitos.
Los principales diarios del país le dedicaron un importante espacio a la sorpresiva decisión de Juan María Traverso de abandonar la práctica del automovilismo.
El diario deportivo Olé, por ejemplo, le dedicó toda la tapa a la sorpresiva noticia. “Andá a lavar los platos”, es el título de la edición, que en su bajada explica: “Ahora nos calentamos nosotros, Flaco. ¿Por qué dejás? A los 54, con más de 30 de carrera, Traverso se cansó. Un crack como ninguno: ganó 16 títulos argentinos. El último gran ídolo del automovilismo”.
La nota principal de la cobertura destaca una frase del múltiple campeón que dice: “Usé hasta el último gramo de pasión que había en mí. No quiero subirme a un auto ni para una exhibición". El informe se completa con diferentes artículos estadísticos y la opinión de otros pilotos, como la de “Cocho López”, quien afirmó que ahora ve a Traverso como un futuro jugador de golf…
Clarín, el diario de mayor tirada en la Argentina, también puso el tema en tapa. “El Flaco Traverso, un grande que se fue de las pistas”, titula. En el interior del matutino, la nota principal lleva el encabezamiento “Traverso puso el freno”. En uno de sus párrafos reflejó uno de los momentos iniciales de la conferencia de prensa que se realizó ayer en Don Torcuato. “La emoción que lo embargaba mientras anunciaba su retiro, lo separaba del cigarrillo que lo acompañó durante mucho tiempo y que fue su marca. Casi no fumó mientras habló. Sólo se relajó y comenzó a prender uno tras otro cuando le tocó responder las preguntas”.
En una columna firmada por Miguel Angel Sebastián, quien cubre para Clarín el automovilismo, el periodista afirma que, Traverso es “un referente como ningún otro en el automovilismo nacional de las últimas décadas, por lo deportivo y lo otro. Un referente que no tiene herederos a la vista”.
La Nación, en tanto, también le dedicó un buen espacio al retiro del múltiple campeón. Allí, se le realizó una entrevista donde recorre algunos de los aspectos más importantes de sus 34 años de automovilismo. Al ser consultado si se siente como el último ídolo del automovilismo argentino, el ahora ex piloto fue rotundo: “No lo creo. La gente va a recordar muchas carreras mías, muchos triunfos. Pero el mundo continúa y habrá otros pilotos. Pero cada uno ocupa su espacio. En su momento se retiró Fangio, se fueron los Gálvez, se mató Mouras, se accidentó Luis Di Palma, y el automovilismo continuó, pero cada uno tuvo su espacio y nadie los reemplazó.”
De 1950, nace Juan María Traverso...
Juan María Traverso nació el 28 de Diciembre de 1950 en Ramallo, Provincia de Buenos Aires. Le dicen “El flaco” porque hasta los 30 años era flaco, luego dejó de fumar 3 años y engordó, para luego volver a fumar aunque sin perder los kilos.
Actualmente tiene su domicilio en Beccar, Provincia de Buenos Aires. Está casado con Susana y tienen tres hijos: María Paula, María Manuela y Juan Cruz. Juan María tuvo una infancia como cualquier chico de pueblo y tiene muy buenos recuerdos de esa época. Desde chico se dio cuenta que lo suyo eran los autos y en especial los “Fierros”. Le representaba una lucha conseguir que le prestaran el auto para dar unas vueltas en el potrero, hasta que a los 15 años pudo tener su propio auto, un F**d A sin escape que hacía un ruido infernal y el que hasta hoy recuerdan los vecinos de Ramallo.
Cursó la secundaria en el Colegio De La Salle en la Capital Federal y luego volvió a su ciudad natal para dedicarse a la actividad agropecuaria.
Se hizo amigo de "Marito" García, quien corría en karting y que luego incursionó en el Turismo Carretera. “El flaco” lo acompañaba a las carreras cada vez que podía y su debut al Turismo Carretera fue consecuencia de que García se incorporó al equipo oficial de General Motors y le cedió su Torino Liebre 1 1/2 con el que estaba participando.
Corrió su primera carrera el 31 de octubre de 1971 en la Vuelta de Pergamino, "Estaba más contento porque había ganado Coppello (su ídolo) que por haber debutado en Turismo Carretera", expresó “El flaco”.
Casi un año después, el 29 de octubre de 1972, ganó su primera carrera: el premio SUPERNAFTA YPF disputado en el semipermanente de 25 de Mayo. En su vuelta triunfal a Ramallo lo esperaba una multitud y los festejos duraron tres días.
En 1973 se incorporó al equipo oficial F**d, ocupando el lugar que había quedado vacante por la muerte de Estéfano y teniendo como compañero a Héctor Luis Gradassi.
En 1977 logró su primer campeonato de Turismo Carretera y repitió la victoria al año siguiente.
Puso algunas concesionarias de autos en Ramallo y San Pedro, hasta que reconoció que lo suyo no estaba atrás de un escritorio sino dentro de un auto de carrera y decidió dedicarse de lleno a esta actividad.
En 1979 hubo ciertos inconvenientes con la ACTC y el equipo F**d, por lo tanto “El flaco” se fue a correr a Europa en la Fórmula 2 con un March. Acerca de lo que implicaba ir a correr a Europa nos comenta “El flaco”: "Con el paso de las carreras le fui perdiendo el respeto a los demás corredores"; Ahí es donde perfeccionó su habilidad para correr con pista mojada.
Bernie Ecclestone le ofreció un contrato para correr la temporada de 1980 en la Fórmula Aurora y las 2 carreras en América de F1, pero en la Argentina su padre tenía problemas financieros (Fiplasto, empresa de la que era dueño don Juan Cruz Traverso, estaba en convocatoria de acreedores) y prefirió volver a acompañar a su padre en esa situación.
En 1983, de la mano de José Miguel Herceg y los hermanos Aventín, volvió al TC y punteó los campeonatos de TC 2000 y TC, pero terminó separándose de “El Polaco” por cuestiones económicas, con lo cual perdió las posibilidades en ambos campeonatos.
En 1985 se incorporó al equipo Renault de TC 2000 con un Renault 18 y en 1986, con Berta como preparador de los Renault oficiales, empezó una racha de sucesivas victorias y títulos en la categoría, obteniendo con la coupé Fuego, los campeonatos '86, '88, '90, '91, '92 y '93.
El campeonato de 1987, que ganó Silvio Oltra, fue una de sus mayores frustraciones deportivas ya que necesitaba sólo 2 puntos en la última carrera para ganar el campeonato y la pinchadura de una goma, sumada a que el equipo tardó demasiado en cambiarla, le quitó el título de las manos.
En 1988 Sevel organizó el 7º Desafío de los Valientes, una carrera en pista y en la tierra donde intervenían los mejores pilotos de pista y de rally. Todos con autos exactamente iguales: un Fiat Duna estándar, el mismo que el público podía adquirir en las concesionarias. Ahí Traverso mostró que era superior ya que les ganó en la pista y en la tierra a los mejores: Guerra, Raies, Bescham, Reutemann, etc.
En 1993 fue a correr al Turismo Italiano con Guerra y se quedó con el subcampeonato atrás de Angelito. Rompió relaciones a fines de ese año con Berta y Renault.
En 1994, con el apoyo de Peugeot, inició una etapa de desarrollo del Peugeot 405 para competir en TC 2000.
A mediados de año volvió al TC y a la victoria dentro de esa categoría con un Chevrolet, terminando sexto en el campeonato. (Consiguió dos triunfos ese año.)
En 1995 armó un equipo propio con Pedersoli, Canapino, Scarazzini, y con Angel Guerra como coequiper en TC 2000. Ganó los dos campeonatos más importantes del automovilismo argentino: el de TC y TC 2000.
Ese mismo año recibió el Olimpia de Plata, pero a pesar de la importancia de sus logros, el Círculo de Periodistas Deportivos le entregó el Olimpia de Oro a Nora Vega, que había tenido una buena actuación en los Panamericanos de Mar del Plata de ese año y había estado en todos los titulares de los diarios.
Ya en 1996 la ACTC, para reducir la diferencia que tenían algunos pilotos con mayor capacidad conductiva o mayor presupuesto respecto a los demás pilotos, implementó un sistema de lastres, penalizando con kilos al que sube al podio. “El flaco” se opuso a ese sistema debido a que obligaba a los pilotos a una permanente especulación respecto de los puntos y los kilos. Los comentarios de Juan María eran en ese entonces: “Aún si vengo ganando la carrera prefiero levantar en la última vuelta, salir cuarto y no ganar para no cargar kilos en el auto, de esta forma consigo mantenerlo más competitivo para todo el campeonato”. Su estrategia resultó acertada y ganó el campeonato de TC. Por el contrario, en el TC 2000 y por desinteligencias en el equipo, perdió el campeonato.
En 1997 fue ganador del campeonato de TC con comodidad y en TC 2000 sólo se adjudicó una carrera compitiendo contra equipos oficiales. (Ese año se implementó una importante modificación reglamentaria y se adoptaron los motores de 16 válvulas.)
En 1998 en TC, pasó a F**d y le devolvió protagonismo a la marca.
Se pegó una “piña” tremenda en el debut en Mar de Ajó y una serie de errores le hicieron perder el campeonato. Luego, ganó el de Top Race y en el TC 2000, corriendo en el equipo Honda y cuando venía siendo el puntero del campeonato, una seguidilla de episodios le quitan el campeonato: la salida de la rueda trasera derecha en el Cabalen, una piña espectacular en Olavarría luego de un toque con Luciano Crespi, problemas con una batería, un recargo por adelantarse en la largada.
En 1999 Campeón de Turismo Carretera con un F**d y en TC 2000 volvió a hacer una apuesta fuerte y se incorporó al equipo Mitsubishi para hacer un desarrollo desde cero. El equipo contaba con la asistencia técnica de Enrique Escalabroni, un ingeniero argentino radicado en Inglaterra y muy vinculado a las categorías más importantes de Europa. No consiguió victorias, sólo sumó 6 puntos y terminó discutiendo con su compañero y dueño del equipo, Gabriel Furlán.
En Top Race volvió a ganar el campeonato y en cuanto al TC, a principios de año se prometió ganar el campeonato y lo logró pero contra la voluntad de la dirigencia de la ACTC y la CAF.
En el 2000 una serie de desprolijidades cometidas, a juicio de “El flaco”, por la dirigencia de la ACTC, hizo que después de la carrera de Buenos Aires convoque a una conferencia de prensa y comunique su retiro del TC, prometiendo volver cuando se hiciera más transparente el manejo de la categoría por parte de los dirigentes. Como consecuencia de ésta decisión, el campeonato 2000 de TC empezó sin el campeón.
Firmó con el Toyota Team Argentina un contrato para ser piloto oficial de la marca en el TC 2000. Nuevamente tuvo que hacer un desarrollo desde cero y alcanzó el podio en la segunda carrera. Durante el año y a pesar de ser un equipo que recién se iniciaba en la categoría, obtuvo un récord de vuelta, una pole position y consiguió, en la última carrera del año y bajo la lluvia, la primer victoria de Toyota en la categoría.
Frontal como siempre, manifestó su descontento con el sistema de penalizar con lastres a los autos que no usaban el motor correspondiente al modelo. Sobre fin de año se modificó el reglamento y se benefició a éstos autos.
Durante el año también participó en el campeonato de Endurance a bordo de un Toyota Corona diesel y en oportunidad de disputarse las 2000 millas de Buenos Aires, compartió el equipo con su hijo Juan Cruz, quien debutaría oficialmente en el automovilismo.
A fin del 2000 la fundación KONEX le entregó el Premio KONEX de platino, un premio que tiene en cuenta la trayectoria de los últimos 10 años y que es decidido por un jurado integrado por deportistas y periodistas de dilatada trayectoria.
A principios del 2001 y sin descuidar su actividad como piloto de automóviles de competición, inició el desarrollo de este sitio conjuntamente con el desarrollo de marketing deportivo dentro del automovilismo, tanto de pilotos como de categorías.
Continuó compitiendo en el TC 2000 con un Toyota Corolla, obteniendo un triunfo el 9 de Septiembre en San Juan, ganando la carrera en la última curva con una recordada maniobra sobre el Pato Silva. Mientras preparaba su posible regreso al Turismo Carretera, realizó algunas pruebas ese año, cumplió 30 años con el automovilismo el 30 de Octubre.
En el 2002 vuelve al Turismo Carretera con un Chevrolet del equipo de los hermanos Urtubey, motorizado por Pablo Satriano.
No tuvo buenos resultados al no poder conseguir nunca un motorista que le entregara un buen impulsor, hasta que se incorpora al equipo Miguel Herceg con quien en la actualidad siguen trabajando.
En TC2000 se desvincula en buenos términos del equipo Toyota después de haber participado en las primeras 4 carreras, después hacia fin de año volvería a correr en la categoría a bordo de un Mitsubishi Lancer del equipo de Gabriel Furlan. También este año volvió a la Top Race manejando un BMW del equipo de Hugo Videla.
Campeón del Top Race con un BMW 320i del equipo de Hugo Videla. De esta manera consiguió su 3er. campeonato en la categoría y ahora son 16 los Campeonatos Nacionales ganados por el Flaco (6 de Turismo Carretera; 7 de TC2000 y 3 de Top Race).
Culminó 12º en el Campeonato de Turismo Carretera con un Chevrolet del equipo del Urtubey Competición.
El 2004 lo encuentra como en sus comienzos luchando por conseguir el Cameponato de Turismo Carretera con un Torino, motorizado por Omar Wilke y con el chásis de Juan Carlos Pianetto. Finaliza el campeonato en el 9º lugar. Además este año asumió como Presidente del Top Race.
En el año 2005 participó en dos categorías: el Turismo Carretera con un Torino y en el TRV6 representando los colores de River Plate con un Citroën C5.
En Agosto del 2005 se recordará por siempre porque el Flaco deja el automovilismo, dijo basta después de 35 años de vigencia y exitos.
Los principales diarios del país le dedicaron un importante espacio a la sorpresiva decisión de Juan María Traverso de abandonar la práctica del automovilismo.
El diario deportivo Olé, por ejemplo, le dedicó toda la tapa a la sorpresiva noticia. “Andá a lavar los platos”, es el título de la edición, que en su bajada explica: “Ahora nos calentamos nosotros, Flaco. ¿Por qué dejás? A los 54, con más de 30 de carrera, Traverso se cansó. Un crack como ninguno: ganó 16 títulos argentinos. El último gran ídolo del automovilismo”.
La nota principal de la cobertura destaca una frase del múltiple campeón que dice: “Usé hasta el último gramo de pasión que había en mí. No quiero subirme a un auto ni para una exhibición". El informe se completa con diferentes artículos estadísticos y la opinión de otros pilotos, como la de “Cocho López”, quien afirmó que ahora ve a Traverso como un futuro jugador de golf…
Clarín, el diario de mayor tirada en la Argentina, también puso el tema en tapa. “El Flaco Traverso, un grande que se fue de las pistas”, titula. En el interior del matutino, la nota principal lleva el encabezamiento “Traverso puso el freno”. En uno de sus párrafos reflejó uno de los momentos iniciales de la conferencia de prensa que se realizó ayer en Don Torcuato. “La emoción que lo embargaba mientras anunciaba su retiro, lo separaba del cigarrillo que lo acompañó durante mucho tiempo y que fue su marca. Casi no fumó mientras habló. Sólo se relajó y comenzó a prender uno tras otro cuando le tocó responder las preguntas”.
En una columna firmada por Miguel Angel Sebastián, quien cubre para Clarín el automovilismo, el periodista afirma que, Traverso es “un referente como ningún otro en el automovilismo nacional de las últimas décadas, por lo deportivo y lo otro. Un referente que no tiene herederos a la vista”.
La Nación, en tanto, también le dedicó un buen espacio al retiro del múltiple campeón. Allí, se le realizó una entrevista donde recorre algunos de los aspectos más importantes de sus 34 años de automovilismo. Al ser consultado si se siente como el último ídolo del automovilismo argentino, el ahora ex piloto fue rotundo: “No lo creo. La gente va a recordar muchas carreras mías, muchos triunfos. Pero el mundo continúa y habrá otros pilotos. Pero cada uno ocupa su espacio. En su momento se retiró Fangio, se fueron los Gálvez, se mató Mouras, se accidentó Luis Di Palma, y el automovilismo continuó, pero cada uno tuvo su espacio y nadie los reemplazó.”
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